Antes de mudarte es importante que sepas todo lo que debes hacer para que tu nueva casa esté lista para disfrutarla sin problemas.
Imagínate llegar a tu nueva casa y no tener servicio de electricidad, gas o agua. Y en caso de tener esos servicios, será peor tu sorpresa cuando veas que el aire acondicionado o la calefacción no funcionan, hay algún problema eléctrico, entre otras cosas. Para evitar estas pesadillas, toma acción anticipadamente. A continuación, las cosas más importantes que debes tener en cuenta.
1. Haz con tiempo una inspección de tu nueva casa.
Revisa la caja o tablero del circuito eléctrico, asegurándote de que las etiquetas estén ubicadas correctamente junto a cada interruptor, por ejemplo, dicen: cocina, baño, sala, etc. Haz esta operación quitando o desconectando cada interruptor (uno a uno) para saber a qué habitación de la casa pertenecen. También puedes contratar a un electricista para que revise en qué estado se encuentra la caja (cuadro o tablero) eléctrico y si es necesario repararla o cambiarla por una nueva. Revisa las alarmas de fuego y los detectores de monóxido de carbono para saber si funcionan bien, necesitan baterías o es necesario reemplazarlos. Compra extinguidores de fuego. Haz que un profesional inspeccione la unidad de aire acondicionado/calefacción, el calentador de agua, etc. Ubica la llave de paso del agua. Es importante saber dónde se encuentra la llave de paso, para poder cerrarla rápidamente en caso de ser necesario.
2. Informa tu cambio de dirección y contacta a las empresas que corresponda.
Antes de mudarte debes notificar tu cambio de dirección en tu trabajo, instituciones financieras, bancos, casas comerciales y todas aquellas con quienes estés en contratos, o te envíen correspondencia.
3. Contacta a las empresas de servicios públicos.
Cuando llegues a tu nueva casa querrás tener los servicios básicos, como cable, Internet, teléfono. Así que contacta con anticipación a esas compañías para fijar la fecha de traslado de esos servicios hacia tu nueva dirección.
4. Actualiza los documentos importantes.
Un mes antes de mudarte actualiza la licencia de conducir, la registración de tu vehículo y tu tarjeta de registro de votante.
5. Cambia los cerrojos. Si la casa está vacía y aún no te has mudado, es buena idea buscar un cerrajero y cambiar la chapa o la combinación de las llaves de las puertas.
6. Revisa el estado del letrero de la dirección de tu casa en la fachada.
El número de la dirección de tu casa debe verse de manera clara, especialmente si harás la mudanza con una agencia. Además, necesitarás que tu dirección se distinga bien para que las vean el cartero, los servicios de entrega postales, los servicios de entrega de restaurantes y tus visitas. Compra un letrero nuevo si es necesario.
7. Identifica las salidas de emergencia en caso de fuego o catástrofe.
Asegúrate de que toda la familia sepa cómo salir de la casa en caso de fuego o cualquier otra catástrofe. Generalmente, todos piensan en la puerta principal de la casa como la mejor opción para escapar al exterior, pero es bueno tener opciones extra en caso de no poder usar la puerta principal.
8. Fumiga y haz una limpieza profunda.
Si tu nueva casa está vacía y tienes acceso a ella antes de mudarte, ten la precaución de fumigar. Aunque no veas insectos es muy probable que existan. No querrás fumigar con químicos fuertes cuando la familia esté presente y los muebles ya estén colocados. Una vez que la fumigación haya hecho efecto es buen momento de hacer una limpieza profunda en pisos, paredes, ventanas, etc. Como la casa está vacía podrás limpiar hasta los rincones más ocultos, lo cual no resultará tan fácil una vez que las cortinas y los muebles estén en su lugar. Esto te dará tranquilidad, tu y tu familia podrán descansar libre de infecciones, insectos y virus (como el Covid) que pudieran existir.
9. Revisa tu lista de inventario para saber si tus pertenencias llegaron bien.
Así hayas hecho la mudanza tú mismo o con una compañía de mudanzas, revisa lo que tienes contra tu lista de inventario para asegurarte de que todas tus pertenencias llegaron bien. Si utilizaste una compañía de mudanzas podrás reclamarle por objetos perdidos o dañados.
10. Ten un botiquín a mano.
Las mudanzas son propicias para que alguien se rasguñe, se golpee o simplemente le dé un dolor de cabeza. Tenlo preparado porque seguirá siendo muy útil en el futuro. Colócalo en un lugar de la casa donde los adultos puedan acceder a él, lejos del alcance de los niños, revisando con regularidad que los medicamentos estén vigentes. En la puerta del botiquín pon una etiqueta con los números de teléfono de los contactos de emergencia de tu localidad.